¿Porque? Pues siempre hay varias razones: mejorar, innovar, llegar a más gente, diferenciarse y otras muchas mas. Si os fijáis bien, en todas estas palabras hay algo en común y es que todas ellas llevan consigo un cambio. Uy! Si, he dicho cambio.
Muchas personas tiene miedo a esta palabra, o más bien a lo que ello conlleva, que es salir de su zona de confort, de lo conocido, de lo fácil. Y entonces, llega el miedo y hace su papel, nos paraliza, nos vuelve inseguros.
Si empezamos a buscar razones, nuestra mente buscará mil y una para defender el estado de miedo y mantenernos en esa zona de confort, en la que todo es sencillo, sin complicaciones, es esa zona en la que nos sentimos seguros, que todo lo hacemos bien, nadie nos dará su opinión y nos hará sentir diferentes porque llevamos tanto tiempo haciendo lo mismo que ya forma parte de nosotros, es casi automático. Se podría decir que ya forma parte de nuestra identidad.
Desde mi punto de vista, estar en una zona de confort no es ni bueno ni malo, simplemente estas parad@, estancado@, haciendo lo mismo, si es eso lo que te gusta, sigue ahí. Pero como creo que ya me vais conociendo un poco, mi mente no puede estar mucho en una zona de confort, lo veo seguro pero muy aburrido. Eso es, la zona de confort es la zona de seguridad, pero y si pensamos...¿Que cosas positivas puedo sacar de un cambio? ¿Cuantas te vienen a la cabeza? Ahí está la cuestión, en pensar en aquello que no vemos, en todas las posibilidades que nos brinda un cambio. En todas las cosas nuevas que podemos ver, aprender, descubrir,disfrutar, vivir. En las personas que podemos conocer, países que visitar o simplemente facetas nuestras que desconocíamos.
Salir de la zona de confort yo lo veo como algo necesario. Cuando hacemos una tarea una vez nos puede resultar complicada, la segunda vez también, la tercera la haremos mejor, en la décima la haremos en menos tiempo, en la 100 vez será una acción automática y ni siquiera pensaremos en cuanto nos cuesta o como la hacemos. Pero...¿Nos hemos parado a pensar en si podemos hacerlo mejor? ¿O ya simplemente nos hemos acostumbrado a hacerlo de esa manera, en la que nos cuesta poco esfuerzo y nos es cómoda? En estas preguntas se encuentra el límite entre la zona de confort y el Miedo a lo desconocido a través de un cambio. Da igual si el cambio es grande o pequeño, el miedo siempre aparece antes o después.
Y amig@s, ya sabeis lo que pienso del miedo:
Si algo realmente te aterra...ve a por ello! Ya que te importa mas de lo que piensas.
Para los que no lo habeis leido, os dejo el enlace del post sobre el miedo.
https://laurilia-bedelicious.blogspot.com.es/2018/02/si-algo-realmente-te-aterra-ve-por-ello.html
Como experiencia personal en cuanto a cambios vividos, tengo una lista enorme, y tengo que decir que de cada uno de ellos he vivido experiencias buenas y experiencias no tan buenas pero de las que, sin duda, he aprendido algo importante, así que finalmente son positivas.
Solo se me ocurre una situación en la que jamas permitiría que se produjeran cambios y sale de una pregunta que suele ser muy repetida en los procesos de selección para cualquier trabajo, es la siguiente: Si pudieras cambiar algo de tu pasado, alguna decisión, cualquier cosa...¿que cambiarías?
Pues señores y señoras, les tengo que decir soy quien soy por las decisiones que he tomado en la vida, soy quien soy por los cambios que he afrontado, y no me arrepiento de ninguno de ellos, porque si fueron acertados, los disfrute, y si no fueron acertados, aprendí para poder disfrutar los siguientes.
Así que amig@s, si tenéis la oportunidad de cambiar algo en vuestras vidas presentes y futuras, pensarlo bien y no dejeis pasar el tren, porque en la vida, estos trenes solo suelen ser de ida.
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